El sexo es un tema que algunos consideran privado y no se habla al respecto, pero en estos tiempos donde el sexo está, inclusive al alcance de un clic, es mejor brindar una información sana que ayude a las personas a entender el tema con más facilidad y saber que se puede hablar libre y sanamente al respecto.
Ante esto, muchos estudios se han hecho en torno al sexo y uno de ellos involucra al sexo según la edad, desde el punto de vista científico. Aunque muchos piensen que el sexo es solo algo físico, la verdad es que va más allá; involucra la fisiología, la anatomía y la parte psicoemocional.
De acuerdo al doctor Jhonatan Arias, médico general de la ESE Hospital Regional Suroriental IPS Samoré, Norte de Santander, el entorno, la crianza y las emociones, los factores psicosociales de los niños puede ser de influencia para su futura vida sexual.
Asimismo, resaltó que, en la adolescencia con el inicio de la menstruación en la mujer y la espermaquia, la primera eyaculación del hombre; se busca conocer su cuerpo y lo que están sintiendo a través de la masturbación. Esto se ve más en los hombres que en las mujeres, ya que para ellos lo importante es el acto sexual, y para ellas existe la influencia y la presión social en cuanto a la pérdida de la virginidad.
En la etapa de adultez, ya hay madurez sexual, ya ellos se concentran en buscar lo que les causa mayor placer y poner en práctica la experiencia ganada, ya no es una etapa de curiosidad sino de disfrute. También entra a relucir, el amor, el cariño, las relaciones sexuales con personas a quienes se ama o con quien ya se tiene una relación de matrimonio.
El doctor Arias explicó que científicamente el sexo es complejo, “la primera liberación de hormonas, de sustancia químicas que recorren el cuerpo con solo un ser humano ver a alguien que le guste; hay una cantidad de cosas que inician solo con el olor, el tacto, se despiertan los sentidos, el sexo no es solo la penetración. Ya allí se pasa de la parte psicoemocional a la parte fisioanatómica, pues todo esto regulado por el tallo cerebral desde el bulbo raquídeo, las glándulas sexuales comienzan a excretar hormonas y esto crea una cascada de neurotransmisores y se disparan muchas cosas”.
Estas cosas se van manifestando en el cuerpo, para los hombres, la erección que no solo viene por “el aumento del flujo sanguíneo en el pene, sino que es un proceso que tiene cabida desde la parte cerebral”, añadió Arias.
De acuerdo al doctor Arias, en la etapa de la vejez, las mujeres marcan una diferencia en cuanto al sexo por la llegada de la menopausia, que no llega obligatoriamente a los 50 años, sino que “puede estar comenzando a los 43 años con unos síntomas y signos lentos pero que se evidencian, y eso genera en la mujer un desinterés sexual. Al hombre no le pasa eso, con la vejez puede ir sintiendo como un golpe en el ego, por así decirlo, y eso le genera a estar más dispuesto al acto sexual, pero olvida ciertas cosas y comienza a buscar ayudas como el viagra. En la vejez, el deseo sexual está mucho más marcado en el hombre”.
Concluyó el doctor que “la sexualidad tiene su enfoque tanto anatómica, como fisiológica, como psicológicamente y lo importante es cumplir cada una de sus etapas, iniciar una educación sexual que le puede sacar de muchos mitos que existen y provocan una euforia en el hombre y en la mujer no. La sexualidad y el deseo sexual son diferentes en todas las personas y en todas las culturas, depende de dónde naces, de lo psicosocial, de los aspectos sociales que te tocan, no es lo mismo una sexualidad en Europa, Asia o en América Latina”.
Datos curiosos
- Muchas mujeres establecen que su plenitud sexual sucedió entre los 30 y 40 años, y para los hombres entre los 20 y 30 años.
- Algunos expertos aseguran que una mujer que haya dormido y descansado bien, tiene más probabilidades de mantener relaciones sexuales al día siguiente.
- El uso frecuente de tacones altos debilita la musculatura del suelo pélvico, lo que trae como consecuencia disfunciones sexuales.
- Algunas encuestas aseguran que el sexo se disfruta más con una pareja estable porque además del amor que hay entre ellos, se buscan nuevas opciones para evitar la rutina y se despierta el deseo de vivir estas experiencias.